Y es que aquí, en el mundo entre Rumbo-fijado y yo, ya casi no hay límites. Es lo que tiene la blogosfera, que te lleva más allá de las historias y los pensamientos modernos. Te traslada a ese mundo real que tanto nos fascina: el de las ilusiones, la novedad, el aprendizaje. Pero si en mi vida las ilusiones, la novedad y el aprendizaje se convierten en fracasos a medias, en la de Rumbo-fijado jamás los hay, porque de todo saca provecho. De ahí el paralelismo.
Aún y así, mi doble personalidad sigue adelante sin mucha frustración. Dentro de poco cambiaré –si la esfera quiere- el aceite de oliva por la manteca de cerdo y los andares entre semi-amigos, amigos, novios y demás por un horario prefijado y un montón de americanitos encantadores. Quizás vuelva con otra tanda de quilos de más. Quién sabe. O quizás el frenesí de “joven trabajadora” me alcanza y pierdo esta absurda pereza que me acosa día y noche. Pereza, a veces. Aburrimiento, siempre.
Que el último es el peor, aunque no os lo parezca. Que estoy empezando a pensar que no nací para escribir, ni para aprender, ni para encontrar cosas nuevas, ni para cambiar el mundo. Últimamente creo que nací para ser vegetal. Una patata, por ejemplo, apetecible pero con demasiada historia dentro de la gastronomía popular.
Y no dudo que sea Rumbo-Fijo, Carmina o cualquier clase de vegetal (volvamos a poner por caso patata), llegaré a donde me toque llegar. Pero quizá en vez de escribir me dedique a hacer cómics y en ellos Rumbo-Fijo comerá una patata radioactiva y se transformará cuando algo deba ser denunciado. Mientras tanto, Carmina se ocupará de mantener al margen a los curiosos que quieran desvelar la identidad de Rumbo-Fijo –o su guarida secreta (Rumbo-fijado)- y su naturaleza de tubérculo.
Es difícil saber para qué ha nacido uno, al final, es el camino el que nos descubre quereres e intenciones. La libertad los perfila, los define. Uno, al final, va eligiendo... como puede y desde lo que puede.
ResponderEliminarUna cosa sí quería afirmar, que todos, todos... hemos nacido para aprender. De cada recodo del camino. Nos toque ser patata, vegetal, tronco o rama. Aprendemos. Y libremente interpretamos. Y esto último... no nos lo puede quitar nadie. Nadie.
Saludos Rumbo.
Ufffffffffffsssssssssss, niña ¿o patata?
ResponderEliminarNiña, niña .... de patata nada, salvo la que te comes .....
Déjate un poco ¿quieres? El cestillo de ensimismamiento que llevamos colgado no ayuda nada.
Aprender, aprender, estar atento .....
Y cuidar la dieta
Hola, Carmina.
ResponderEliminarYa tenía ganas de leerte desde tu ricón ciberespacial.
He creído entender que , de momento, los curiosos que dicen, piensan, opinan cuál es la esencia y a qué se debe dedicar RumboFijo... mejor que metan las narices donde quieran menos en el parapeto de Runbofijado . Cuando toque, la patata radioactiva será ingerida y ya explotará en un lugar actualmente desconocido y el adecuado en su día. De momento... a callar y a mirar a otro lado.
Igual interpreto demasiado... pero me huele que el final es una declaración de intenciones.
Estoy contigo que es mucho peor el aburrimiento que la pereza... sin desmerecer los efectos devastadores de ésta.
Quién sabe. Tal vez en las Américas halles la piedra filosofal...
Un beso muy fuerte.
¿Aburrida?Nunca pensé que la cosa fuese tan seria.Y en serio lo digo
ResponderEliminarNo domino los chats,te lo dije en facebook pero ignoro si lo pudiste leer. En el fondo sólo me manejo bien con el sobre, la carta, el boli y el sello.Antigua
Hos es mi santo. La Candelaria. Espero tu felicitación. No te preocupes, como si se te hubiera ocurrido a ti
¿Qué vas a hacer a América?
Soy Mireia. No me sale bien esto de enviar el comentario
En el mundo vegetal no se vive tan mal.
ResponderEliminarHubo un tiempo en el todos fuimos palmera en oasis egipcio. Demasiado calor de día y demasido frío de noche. Y cambiamos.
Luego está la clásica historia de ser una simple escarola verde. Las cuestiones de limpieza personal se tornan dificultosas.
Demasiada tierra. Y cambiamos.
No olvides que siempre hay un momento en que sale la oportunidad de ser un esbelto junco asiático. Está bien. Se saben adaptar perfectamnte a los diversos vientos. Opción divertida.
Lo de la patata creo que lo planteas como una reminiscencia de su americano origen.
Al fin y al cabo, nunca se le ha reconocido su importancia nutritiva en la desvalida historia alimenticia de la Europa de los Reyes Católicos.
¡Rompamos pues una lanza por su reconocimiento histórico!
Y lo de dejar de escribir, simplemente no me lo creo.
Al fin y al cabo, yo también soy una patata.
...
PD: Espero verte en Madrizzzzzzz.
Y hablar, aunque sean 10 minutos sobre los tubérculos.
Puede tener su punto.
Saludos patateros.
Driver.
Dicen las abuelas que con patatas, aceite y arroz se pasa una guerra.
ResponderEliminarEs lo que se me ocurre.
Te ahogas, y sientes que todo esto se te está quedando pequeño. Pero no te me agobies: es cuestión de tiempo amiga del alma querida!
ResponderEliminarA todos nos ocurre a menudo. O quizás generalizo demasiado diciendo "todos" y sólo es algo que también me ha pasado a mí.
Nos agobia la rutina, la mediocridad de los días, que transcurren sin más.
Queremos ser fantásticos, magníficos,legendarios y excéntricos para llegar a ser, a nuestro modo, especiales, diferentes.
Lo que no sabemos, a menudo, es que lo que nos hace realmente formidables, excepcionales y fantásticos es hacer del aburrido día a día algo cautivador y excitante.
Espero que con éste cambio de aires, alejada de tu querida playa y tus sandalias, entiendas que la verdadera grandeza está en nuestro cambio, por llegar a ser lo que siempre soñamos.
Después de un tiempo, entenderemos, contemplando con embeleso nuestra "obra", lo que empezamos a construir un día, en que algo cambió en nuestro interior.
Te quiere y desea lo mejor,
Anónimo.
Ana, lo sé. O espero saberlo (o creo saberlo, que es mucho mas inquietante) Sólo espero no equivocarme de camino, aunque últimamente tengo esa sensación.
ResponderEliminarDesde luego, si hay que ser patata, patata seré.
Un besito
mamaaaaaaaaaaarg, que dejes el ensimismamiento. De tanto repetirlo me "indinso en él".
ResponderEliminarUn beso
Sunsi :) Ahí estamos, buscando la piedra filosofal. Pero se empeña en no aparecer por ningún lado!
ResponderEliminarMireia, pues... se me olvidó totalmente. Discúlpame. Lo demás ya lo sabes!
ResponderEliminarun besazo
Driver, claro que no dejaré de escribir. Ya lo sabes. Es imposible. Pero a veces cuesta. Fue un placer conocerte, un poco más.
ResponderEliminarUn beso
Lolo, y no había comentario más acertado, jeje.
ResponderEliminarBesitos
Anónimo, gracias por tu aliento. Eso espero que suceda. Quien sabe. Cambiar de aires siempre va bien para verlo todo con un poquito de perspectiva. Quizás algo cambie. Mantengo mi total esperanza en ello.
ResponderEliminarGracias :)